Gabriela Duarte es un desastre, con su cabello despeinado y con una sonrisa que puede con todo, pero su felicidad es apagada por la traición de su mejor amiga y su prometido, engañada para ser su madre subrogada, ella nunca imagino que el niño que estaba engendrando era de su prometido.
Triste, sin empleo y con el corazón roto, ella sigue adelante, sin desmoronarse por completo, pero la tristeza no es para siempre y es allí donde está este hombre egocéntrico que pondrá de cabeza la vida de Gabriela, trayendo con el de nuevo una la ilusión de un nuevo amor.